Mostrando entradas con la etiqueta Padre Isla. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Padre Isla. Mostrar todas las entradas

lunes, 24 de junio de 2013

Todo o nada.

Hola queridos/as lectores/as!!! Como os prometí, más tarde de lo que tenía previsto, mi poesía del Recital Poético 2013 del Pisla. Inédita bajo ningún formato, corta, sencillita en cuanto a enrevesamiento,  y con toque made in By Carmen:D. Ya me diréis qué os parece....


Todo y nada.

Nada y todo van siempre de la mano.
Hoy no ha pasado nada.
Hoy ha ocurrido todo.

Nada. Vacío. Nulo. Que no existe.
Entonces, ¿por qué se le nombra y da nombre?
Todo. Mucho. Inmensidad. Lo más grande.
Entonces, ¿por qué se abarca tanto en tan pequeña palabra?

Nada y todo son mentiras, rodeadas de verdad.
¿Dónde está la nada?
¿Dónde está el todo?

Si la nada y el todo estuvieran juntos
la nada tendría algo (todo)

y al todo le faltaría algo (nada).


Os dejo el vídeo del Recital completo, por si alguien se lo perdió y quiere verlo...Muy pronto, más, seguid pasándoos por aquí. By Carmen:D

domingo, 16 de junio de 2013

Revolviendo:)

Mmmm. No me puedo creer que vaya a volver a pronunciar, a teclear, esa frase épica que abre la puerta a una inmensidad de divagaciones soporíferas. (Sí, del enrevesamiento rutinario;)...¡¡Aguantad a leer al menos la frase, no cerréis ya la página, demonios!!
Hola queridos/as lectores/as!!!  Y ya está. Un crujir de dedos y el teclado del portátil empieza a sonar de la forma más parecida a una maravillosa máquina de escribir. ¿Qué pensabais, que me iba a ir sin una nota de suicido ni nada? No, después de, atentos, 26 días de terribles sufrimientos, je suis lá (aquítoy). Ahora ya me tenéis sin exámenes (:D) y con un verano por delante para contaros infinidad de cosas.
En este mes he hecho pocas cosas útiles, apenas he leído, aunque puedo decir que he cultivado con ganas y buenos resultados el género narrativo de "Tormenta de ideas".  También me hecho una experta en hacer extensos y mareantes carteles psicodélicos, multicolores. Otra novedad: como premio a un sacrificado curso he recibido un nuevo, flamante y seupercalifragilístico móvil ultramoderno una vieja, polvorosa y supercalifragilística máquina de escribir heredada sin condiciones mortuorias. Ya soy feliz, me conformo con poco, tan solo con saber que tengo en mi poder un tintógrafo (¿eso existe? Me da igual) y que no dudaré en usarlo. Pero reconozco que aunque sea más típica-tópica la máquina de escribir, a cualquier ente que le de por poner palabras una detrás de otra le es mucho más últil un ordenador.
Ah. Por cierto. Me complace anunciaros que he ganado el segundo premio de la Modalidad Básica del Concurso de Cuento y Poesía de mi instituto (Pisla IES Padre Isla). Felicidades a los demás ganadores y a todos los que participamos en el Recital Poético. Mi relato fue "Ya no saben qué inventar", que podéis ver aquí, y en mis relatarios; y en cuanto a mi poesía (flipante: yo escribiendo poesía), no es una poesía, sino unas líneas de prosa poética (aaaahh, ahora todo tiene sentido). Lo más extraño de todo es que se trata de un poema del archivo, concretamente del 16 de enero del 2012 (2º de la eso), y sin embargo nunca la había publicado ni leído. Próximo post: prosa poética antimates con sonrisa.





El curso termina. ¿Aprobaré Gimnasia (sí, G-i-m-n-a-s-.i-a, y dad gracias de que no he quitado la mayúscula)?¿Me cabrán todos los libros de la biblioteca en la mochila?¿Echaremos de menos las clases?¿Hará calor mañana? Un 75% de respuestas a estas preguntas es "no", y un 25% es "sí". Repártanlas ustedes como vean. Dejo testamento visual de este mes y la promesa de volver ya como de costumbre...relatos, pensamientos, reseñas, chorradas varias y lo que el verano me ponga por delante. By Carmen:D
Entretenimiento en clase.
Entretenimiento en clase cívicamente: borrar después de fotografiar.
Libros para verano.





Una verdad tan grande como una casa :P


sábado, 27 de abril de 2013

Goodbye Jimi:)

Hola queridos/as lectores/as!!! Hoy toca post especial, homenaje al día a día en el instituto interrumpido por las excepciones del instituto. Veréis: Jimi, profesor sustituto de Arte (así, tal cual, englobándolo todo) se nos ha ido en vacaciones. No me digáis que no sabéis de quien hablo, porque hay un post en el que os enseño una de sus hazañas artísticas. ¿Cómo? ¿Qué no os acordáis? Pues ale, clicaz aquí. He pensado muchas veces en hacerle un homenaje/despedida tal y como se merece, por todo lo alto, aquí en el blog. Pero me da mucha pena ponerme a pensar en ello, así que prefiero quedarme con la opción de gritar "Jimiiiii!!!" cuando nos viene a ver al instituto, y te lo vuelves a encontrar como cuando lo veías a todas horas, siempre acompañado, siempre igual y diferente...No voy a ponerme melancólica. Larga vida a Jimi.
Uno de los últimos maravi-trabajos (la lista de maravi-trabajos es interminable) que hicimos con él fue "Conviértete en fotógrafo/a por unas semanicas", consistente en hacer fotos de lo que quisiéramos  pero que significaran algo. Ej: contrastes, escalas de grises, formas geométricas, armonías, círculos, cálidos y fríos...4000 fotos. Sí, con tres ceros la mar de monos (y las tuvo que corregir todas;). Y como no podía irse del Pisla sin dejar una huella emocional en el ánimo de todos, volvió y expuso una selección de fotos, ordenadas y con nuestros nombres. Bueno, nombres no, nuestros alias, porque Jimi siempre te llamaba por el alias...Lo que más ilusión ha hecho creo que ha sido que todos vieran su nombre alias ahí, y la foto, todo como si fuéramos profesionales.

Todo el mundo a quedado encantado con la exposición, éxito total. Me parece que lo más pequeñito que podía hacer para agradecer a Jimi todo lo que ha hecho y gastado por nosotros (incuantificable) es poner algunas fotos de la exposición, pero os aviso de que yo y la cámara no congeniamos bien....mi pulso es un puro tembleque aleatorio. Ya que me puse con la cámara, tengo alguna foto más para dejaros, pero eso será en otro post. A los que les de exactamente igual todo esto, lo siento. A los que les de exactamente igual todo lo relacionado con el instituto, lo siento también. A todos mis compañeros, felicidades por las fotos porque son muy buenas... A Jimi, (porque sé que estás ahí), que sepas que te recordaremos siempre como un buen amigo ( y sigue pasándote a vernos, por supuesto).
Disfrutad de las fotos


















domingo, 14 de abril de 2013

"Crimen desperfecto"



Hola queridos/as lectores!!! Hoy, muy malvadamente por mi parte, os voy a dejar a pan  y agua. Solo tengo para daros mi relato de la 4ºsesión de Cartapacio, del viernes pasado. El tema: asesinato en el Padre Isla. He decidido pasar de la más que suculenta opción de poner nombres reales, opción permitida esta sesión, para sustituir por seudónimos. Relato ficticio del todo que estaría muy interesante que pasara de verdad, he intentado que tenga bastante tinte negro, aunque no he conseguido hacerme pasar por Philip Marlowe, con la ilusión que me hacía. Se nota bastante que soy yo quién....no, spoliers no, querida Carmencita. Le he dado muchas vueltas a si quitar o no los tacos que me ayudaban a ambientarlo en el ¿relato negro? y el instituto, y al final he decidido hacer una excepción y dejarlos. No sé, es que si uso el truco de sustituirlo por imprecaciones en castellano antiguo no da el pego. Así que correctos adultos, no se piensen que hablo vulgarmente hasta cuando escribo.
 Bueno, a cambio os dejo con una jugosa noticia: en breve y si nadie nos lo impide, tendréis la reseña cinematográfica de "El Club de los Poetas Muertos", esa película que todo el mundo ha visto menos la gente de Cartapacio. Y eso se tenía que acabar, no? Pues nada, habrá que saber la historia de nuestros primos XD. By Carmen:D

 Crimen desperfecto.

<<Joder, tío, qué chungo>> Y después Sergio salió corriendo pasillo adelante, hasta que él y sus frenéticos joderes llegaron a Jefatura de Estudios. Si os sorprende tanto como a mi que esta historia comience con un personaje al que nadie conoce, sin relevancia ninguna; entonces os sugiero que penséis que igual de sorprendido debía de estar Sergio cuando vio el cuerpo

 de Daniel allí, retorcido en el suelo y con la cabeza asquerosamente deformada. Medio pelo lo tenía teñido de rojo, de sangre seca, la misma sangre con la que en el suelo se había escrito: “Vete con los terroristas”, y un símbolo complejo de describir, es especial porque nadie recordaba haberlo visto nunca. Si queréis saber científicamente cómo estaba aquel cuerpo en descomposición yo no soy la más indicada, solo os puedo decir que Nadia se desmayó al ver la cabeza de Daniel reducida a un plancha escarbada de unos cuantos centímetros.

Cuando la increíble capacidad de argumentación de Sergio le permitió explicar el tema del fiambre, prácticamente ya estaba aquí la bofia. Y no sé por qué lo digo así, “la bofia”, cuando debería de decir “ya estaba aquí mi padre”. Porque, querida gente de Cartapacio, ya os adelanto que esta es una historia real, donde yo soy yo y cada uno es cada cual.
Aquella mañana no hicimos nada. Era asesinato, concluyeron muy acertadamente a las once, y nosotros rumiamos la noticia con ganas hasta las dos y media. No penséis que éramos lindos corderitos conmocionados por la muerte de uno de sus compañeros (para ser más exactos, mi compañero de pupitre). En realidad ya estábamos envenenados de cuchichear y hacer tómbolas sobre la identidad del asesino, que por supuesto debía de ser algún adolescente, alguno de esos amigos de Daniel, de aquel instituto para pijos, todos muy chulos y con dinero de sobra para pagarse el capricho que quisieran. Una historia trágica, una detención escandalosa para los medios, un juicio rápido, llantos de las dos familias, alguna novia desesperada tal vez, un reportaje sobre la crueldad de la vida en la juventud y ale, a seguir. Nadie daba un céntimo porque la solución fuera otra, nadie conocía otra causa posible…y, sin embargo, era obvio que aquel asunto tenía algo que lo hacía complicado y sin sentido. La puerta se desatornilló en el momento justo, exactamente cuando Daniel estaba de espaldas a ella. El cráneo y la nuca quedaron destrozados; ni siquiera él tuvo tiempo de ver quién era el cabrón que lo mataba. Luego estaba la firma con la inquietante frase; y aquellas Vans, aquellas machacadas zapatillas que habían quitado de sus pies para dejarlas en la repisa de la ventana abierta, como si alguien invisible estuviera apunto de saltar al vacío del patio…o ascender al cielo.

En el instituto las hipótesis me asaltaban a cada paso y en casa el asunto dio unas conversaciones extraordinariamente largas en las comidas. Tuve que decir hasta qué marca fumaba cada compañero. Mi padre, el señor inspector, tienen sus métodos. A mi madre, pese a estar en la Científica, le va más lo psicológico. A mis hermanos, la acción, las persecuciones por el Madrid nocturno y los tiros. ¿Veis? Como no quieren que tenga debilidad por los asesinatos si en mi casa son como los pequeños placeres compartidos? Pero es cierto, mi afición era algo público. La novela policíaca no tiene secretos para mi, y escribir relatos donde los asesinatos y los suicidios eran muy usuales es un pasatiempo que me hace muy feliz. ¿Acaso hay algo mejor que pasar una buena clase pensando en un intrincado asesinato o buscando indicios criminales en el profesor? Todo el mundo lo sabía. Esa fue la conclusión a la que llegué ayer por la tarde, cuando por última vez mi padre se puso a darle vueltas a lo que ya era el asesinato perfecto. Pocos sospechosos y con coartada, ningún móvil. Lo único relevante que había en la vida de Daniel, a parte de algo de desmadre incontrolado los viernes por la noche, era esa sonrisa inocente que nos volvía locas a todas.

Todo el mundo lo sabía. Y, por primera vez, empecé a recordar. Era la tarde más apropiada para pasarla haciendo un trabajo de Geografía. Llovía. Estaba en su casa, en casa del chico aquel, con ojos de lechuza. Estrellados, de un color pálido pero intenso comparado con el gris de la habitación y el exterior. Llevábamos dos horas sin levantar los ojos del ordenador, con los condenados sectores de la economía en la retina. Ya era hora de un descanso, y me dejé caer como un peso muerto en el sofá. Era muy cómodo, todo lleno de motivos abstractos, donde no se distinguía ninguna forma clara. Encendí la televisión pulsando un botón cualquiera del mando. Sonaba un saxofón, muy pedante y glamuroso, que acompañaba de miedo a la lluvia.
El chico de los ojos de lechuza trajo dos vasos llenos de Coca-Cola. Adoro la Coca-Cola por encima de la Fanta y el agua, así que no le hice ningún asco. Maldita sea, que claro lo veo ahora todo.   Seré imbécil. Sabía extraña, con una pizca ácida al final. Casi dulzona, más bien. “¿Es Coca-Cola de cereza, de la que venden en Francia? Sabe muy bien. Yo me traje una botella del viaje, ¿y tú?”. Coca-Cola de cereza. Seguro. Era droga, así que ya podéis decir por ahí a decir a qué sabe la Coca-Cola de cereza. Me la tomé toda y en dos minutos veía un equipo de natación sincronizada bailando un tango en los motivos abstractos de sofá. Ahora que lo pienso, incluso me recuerda a la firma del crimen.
Empezamos a charlar. Primero superfluamente, pero luego me sorprendió con un “¿A quién matarías de la clase?”. Lo consideré un halago a mi afición y me tomé mi tiempo para responder, o para conseguir decir algo coherente. Yo reía en un susurro, pero casi histéricamente. En fin, risa tonta. Por una ridícula casualidad, me decidí por Daniel. No me preguntó la razón, pero se la dije de todas formas: “No aguanto que me rompa los bolígrafos.” Me dijo que estaba de acuerdo conmigo, que también mataría a Daniel pero por motivos más sustanciales. Luego vino un “¿Y cómo le matarías?”. Di varias vueltas en el sofá hasta que me sentí cómoda, pero luego me levanté de pronto y empecé a recorrer la habitación en círculos. Desgraciadamente, le contesté “Con algo que no se esperase nadie, algo sin sentido. La forma, directa, sin rodeos pero estremecedora, ¿qué tal un golpe de una puerta?; y dejaría pruebas, suficientes pruebas como para despistar y confundir a todos. No sé, por ejemplo alguna frase inútil, como…”Vete con los terroristas”, y algo simbólico…tal vez sus zapatillas colgando de una ventana.
Y el asunto se zanjó sin más preguntas ni reveladoras respuestas, porque perdí el conocimiento después de dar vueltas por toda la sala. Cuando desperté, el chico de ojos de lechuza me dijo, con mucho tacto, que me había quedado dormida y que era ya un poco tarde. Yo me fui a casa sin acordarme ni de los sectores económicos y todos tan contentos.

Vosotros, al igual que yo ayer por la tarde, debéis de tener ahora esa sensación en el paladar de que algo se os escapa, algo como un mal presentimiento. En efecto, hacéis bien. Si el asesinato misterioso era exactamente como lo había descrito yo en aquella lluviosa tarde, y en aquella lluviosa tarde solo había una persona más que oyó cómo mataría a Daniel…Es muy obvio que todas las papeletas para joven asesino se las lleva el chico de los ojos de lechuza. Eso ya me estremeció bastante, pero además empecé a sentir como si yo también hubiera matado a Daniel. Sí, yo también lo he matado. Todo ha sido hecho tal y como yo lo pedí, como para complacerme. No sé qué puede razones puede tener el chico de los ojos de lechuza contra Daniel, pero me parece una broma terrible que me haya implicado…Tal vez, si yo no le hubiera dicho nada, se hubiera quedado en un simple odio…Yo también lo he matado, soy el cerebro que movió la mano. Mierda, también soy la hija del inspector.
Inspector que ahora mismo está componiéndoselas como buenamente pueda, con mucha pompa y teléfono pinchado; mientras que yo ya sé quién es el asesino. Y, para acabar con los escalofríos, lo último que me estremeció fue que yo soy la única que conoce la identidad del asesino, pero claro, el que mata a un chaval aparentemente inocente también puede matar a alguien que sabe demasiado…Y quién me dice a mi que ese infeliz, ese al que tengo todos los días a unos metros, ese que supuso que yo no recordaría nada de aquella siestecilla, ese al que todos conocen con solo nombrar el apellido, en fin, ese que hace diez minutos que me he dado cuenta que está en la calle, esperando a que salga de casa para ir a este Club de Escritura. ¿Será con navaja, palos o me ahogará con una cuerda? Da igual, tengo que salir, os llevaré esta confesión improvisada, diré a todos quien ha sido el asesino de Daniel. Si ahora mismo soy yo quién está leyendo esto, habrá un asesino suelto menos en este mundo. Espero que no sea yo quien haya de ocupar su puesto…


                                            PUNTO FINAL

domingo, 27 de enero de 2013

Ocho escritorzuelos con bastante de escritores.

Hola queridos/as lectores/as!!! De nuevo bajo la lluvia nos volvemos a encontrar. Si es que este mundo es un pañuelo, meteorológicamente hablando. ¿Qué tal os trata la vida? Supongo que si no sois de esos que ahora están en largas tramas judiciales con nombres de cosas raras (más os vale que no, os va el descanso espiritual en ello), mal, como a todos. En ese caso, os traigo un consejo de primera que me he dedicado a experimentar con mucha gente últimamente. AC-DC a todo volumen y muchos cojines que tirar contra la pared. Haced que al día siguiente no podáis levantaros de la cama por la afonía.
Tengo como obligación comentaros, aunque no os interese lo más mínimo, qué tal fue la primera reunión de Cartapacio. Pues fue bien. Sí, sí, creéroslo, fue bien. Ya, yo también tenía el regustillo en la boca, el día antes, de que igual por allí no aparecía ni un alma en pena. Creía que la conserje ya se habría acostumbrado a vernos por allí varias veces al mes, colgando y descolgando carteles, y metiendo carpetas por debajo de las puertas. Necesitamos que se comprobara que nosotros eramos verdaderamente nosotros, los chavales que dijeron que iban a crear un Club de Escritura. Una vez que todo el personal que había en el Pisla por la tarde (cuantificables con los dedos de una mano) supo que "los chavales del Club" estaban allí, todo fue sobre ruedas. La biblioteca me pareció inmensamente grande, oscura y vacía. Tal vez sea porque era grande, oscura y vacía. Solo tuvimos que juntar dos mesas y apartar un regimiento de sillas innecesarias, levantar tropecientas persianas y poner uno de nuestros carteles en el atril de exposiciones. Ya no era ni grande, ni oscura, ni vacía. Ahora era un biblioteca hecha a la medida de Cartapacio.
 Eramos ocho, ocho jóvenes escritorzuelos (y no quedó ninguno, jejeje;). Cuatro chicos y cuatro chicas somos la plantilla de Cartapacio, donde, nunca mejor dicho, hay un poco de todo. A mi parecer, todo cuajó desde el principio. Hablamos, leíamos decálogos del escritor, escuchamos música (gracias por la aportación^^), algunos entraron en trance y otros flipamos en blanco y negro, pero más en negro que en blanco. Ah, claro, y leímos los relatos. Hay muy buen nivel, cada uno tiene su estilo, cada uno leyó un relato sobre sí mismo, donde él/ella era un actor que se representaba. Oir y ver ocho historias distintas, orginales y de calidad fue como leerse ocho buenos libros en un solo día. Recomiendo la experiencia, y espero con ansiedad clínica la próxima sesión. Quedan los carteles por hacer, y decidir alguna cosa. En función de eso veré que hago aquí, igual creo una sección para ir actualizando con mis relatos, info y novedades...todo se andará. Por ahora os dejo mi relato, tema: uno mismo (por si alguno aún no me conoce) y una gran sonrisa. No os perdáis lo nuevo sobre el día de la paz, el miércoles en el blog. By Carmen:D.

Todo lo que puedo decir de mí, y más.

Tal vez lo más secundario de mi sea que estudio 3º de la eso en el Pisla y que tengo 14 años. Lo menos secundario es que soy una enarmonada de la escritura, para mi el mundo son palabras. Escribo, escribo continuamente en mi cabeza (dicen que es la mejor forma de aprender a escribir), y cuando me canso hago guiones de cine mentales. Hace ya dos años decidí que yo quería escribir relatos, cortos, largos, micros o macros. Mis personajes suelen ser personas reencarnadas en patos, papeleras o psicópatas suicidas. No tengo ningún tipo de orden o método al escribir, sencillamente llevo siempre trozos de papel y un boli encima para escribir frases o ideas, y la mayor parte de las veces ni yo entiendo mi letra. Como no resultará extraño, soy de esas personas que no pasan ni un solo día entre que acabe un libro y empiece otro. Leo desde que tengo memoria, y mi escritor favorito es Jordi Sierra i Fabra, porque envidio terriblemente su vida. Me gustan las novelas de aventuras y misterio y no me puedo resistir a las policíacas. Mi género favorito es el Realismo.

Entre mis aficiones están desde debatir o conversar, el cine, la música, la Literatura o la Historia (es la mejor novela que hay, donde todas las historias se entrelazan); a cosas tan inútiles como pintarme monigotes en las yemas de los dedos, técnica que he mejorado considerablemente hasta hacer obras de arte, aunque también me dedico a estampar el símbolo hippy por todas partes. Mi mesa de clase es un mundo de garabatos. Reconozco que me encanta dormir, para poder soñar, a mi no me encontraréis levantada más allá de las doce, y solo si echan una buena película. Desde hace un año y pico llevo un blog llamado No le digas a mi madre que vivo en este mundo, en el cual hablo de todo y todos, están mis relatos y cada post es un relato más. Ya es algo imprescindible en mi vida.
Me gustan las manifestaciones, los helados en verano y los churros con chocolate en invierno, los músicos callejeros que, lo quieras o no, te alegran el día con su música cuando nosotros deberíamos alegrarles a ellos con unas monedas. Me gusta reír y sonreír, los chicles de canela picante, los días de lluvia y los paraguas porque me recuerdan a mi querida Asturias, y ponerles nombre a los objetos (un ejemplo: mi lámpara se llama Mariluz.)
No me gusta gente (distinguiendo entre gente y personas, claro) que no tiene personalidad y sigue a la masa hasta  caerse por el precipicio, yo soy de los que siempre tienen que ir contracorriente. Odio, y perdón por lo radical de la palabra, las clases de Gimnasia y las ciencias exactas. Soy como un pato: mi mente es algo independiente que solo piensa en echar a volar, y a la que es difícil hacer entender que dos y dos son siempre cuatro; y mis patas de pato me impiden hacer una voltereta como Dios manda.
Mi mayor trauma es que cuando estábamos en el colegio, por un Carnaval, disfrazaron a todas las chicas de clase de las Princesas Disney, todas muy guapas, y a mi me pintaron la cara y manos de verde moco y me pusieron un traje negro de viuda. Era la bruja de todos los cuentos habidos y por haber. A veces tengo pesadillas con eso. Mi mayor miedo, como contrapunto de mi cabeza llena de pensamientos, es la nada. Según mi carácter, hay dos yos primordiales: una es introvertida, siempre metida en mi mundo interior, sarcástica y melancólica; y la otra es una explosión constante, hablo a voces, solo digo extravagancias y me gusta llamar la atención. Hay días que subo a mi tumba vampírica entre las nubes y estoy por ahí, pensando, imaginando, huyendo de una realidad que no soporto. Otras veces bajo a las calles de los mortales para chupar todas las ideas y fuentes de inspiración, paseando sin rumbo y dejándome empapar de la vida. Eso sí: soy permanentemente idealista, dispuesta a embarcarme en cruzadas por causas perdidas y volcarme en luchas contra injusticias. Voy por la vida con el “paz y amor” por bandera (o al menos lo intento) y todas las mañanas me leo una de las oraciones de Ghandi que tengo colgada en la nevera, que es como mi abc.
La continuación perfecta de mi vida sería estudiar Derecho en Oviedo, publicar mucho, tanto en blogs como libros, salvar a unos cuantos niños pobres de África, esparcir la paz y libertad por el mundo, viajar a todas partes y conseguir poder llegar a cualquier parte en tren, porque conducir me da auténtico pavor. Igual hasta ganarme un Nobel. Pero he dicho perfecta, así que mejor me dejo de soñar. Probablemente sea abogada o fiscal, me haga voluntaria de Amnistía Internacional, consiga viajar por Francia y me tenga que sacar el carné de conducir. Pero hay una cosa que tengo clara: tendré un pato que se llame Cabrales y seremos como hermanos.

Creo que solo me dejo que siempre acabo con un PUNTO Y FINAL.

martes, 22 de enero de 2013

Larga vida al plinto.

Hola queridos/as lectores/as!!! Visto que la lluvia sigue haciendo esquí en todos los cristales de este país y no piensa parar, y después de comprar ayer unos buenos libros como remedio a la apatía de estar en casa sin hacer nada (pero austeramente, que estaban a 6€), hoy tengo que ponerme a esto sin eludir ninguna responsabilidad. Qué fastidio. A este paso pronto necesitaré un abogado.
Dedico con mi mayor deseo de conservar mi integridad física y mental este post a toda la fauna y flora del instituto de la que a veces hablo. Hoy no me hundiré en dramatismos, tenemos la fauna (gente malvada) y la flora (gente no malvada), y que cada uno clasifique como le dé la gana. Supongo que a todos los (pocos) que me lean y no sean del instituto les sonará a chino, bueno, tranquilos, tomáoslo como si fuera un relato y lo que contara una ficción.

Así me deberían de salir las acrobacias.
¿Conocéis a Alfredo? (Hay es cuando los/as del Pisla dicen:"Como no, el bueno de Alfredo..."). Bueno, pues es el profesor de Gimnasia, es mi profesor de Gimnasia. el profesor de Educación Física, mi profesor de Educación Física. A Alfredo también se le conoce, para mi desgracia, como Fredi, Fredinski o SuperAlfred por sus mortales con trampolín. Y digo para mi desgracia porque unos cuantos salieron de mi maldita cabeza (nunca difundáis motes de profesores si hay posibilidad de que dicho profesor/a se entere y tu te enteres de lo que vale un peine). También hay que decir que cualquier connotación peyorativa referida a este personaje imprescindible de la vida corriente del Pisla es innegablemente malvada, ya que el señor Cuevas es un gran atleta y entendido del balonmano que no se merece el desprecio de sus semejantes ya que nos ayuda a aprobar dejándonos el Gimnasio en los recreos para hacer nuestras pseudovolteretas.

 Este año las clases de Ed.Física están más interesantes que nunca teniendo en cuenta que de nuevo me tengo que enfrentar con las acrobacias o, visto de otra forma, las acrobacias se tienen que enfrentar de nuevo con una firme defensora de la teoría de la gravedad. Si estoy ya bien con la cabeza arriba, ¿por qué darle la vuelta? Pero sobre todo, es enternecedor ver pasar los segundos en el cronómetro de Alfredo, tan ágiles como el último curso, sin dejarse olvidado un solo momento en el que no hablemos. 13 minutos fue el Récord Guiness que me tiene aquí, envidiando a Quevedo por su posibilidad de mandar sonetos atrevidos anónimos a la corte del Rey (el colega se lo tenía que pasar realmente bien).

No era una paloma tan bonita como esta, la verdad.
El cuadro no puede ser más ridículo: interior, iluminación media, 28 chavales/as alienados y un profesor al frente. Flotan aires de fusilamiento en el ambiente. Los alumnos/as pierden al juego de "a ver quién se ríe primero" al ver entrar una paloma en el patio interior. Nunca se ha visto que semejante bicho emplumado pueda causar más distracción, ni siquiera con los niños pequeños que persiguen palomas. Risa tonta, de esa que también debe de salir cuando estás borracho/a. No sé por qué tuve que exclamar aquello de "¡Anda, una paloma!" (¡anda, un país sin gente corrupta!), pero el caso es que lo hice. Nos distrajimos todos mirando como el animalillo del Señor intentaba coger un resto de bocadillo del recreo y se le escapaba del pico. La perfecta metáfora del aprobado según algunos. Alfredo decide recuperar su dictadura del cronómetro, fuera la democracia participativa palomil. ¿Alguien está llamando a Alfredo dictador? ¡No! Y que le parta un rayo al que se atreva. La comparación tan solo se basa en el número de personas, por que según el señor con cara de intelectual de mi libro de Ciudadanía del año pasado, cuando los tres poderes (atención, explicación y copiado de apuntes) de una nación clase están reunidos en una sola persona, eso es una dictadura. Vamos, que ya puestos todas las clases son una dictadura, así que no hay razón para la ofensa.

El voluntariado obligatorio, bella antítesis, es práctica habitual en las clases de Alfredo. Los dos detenidos fueron interrogados respecto a qué y en cuanta cantidad se estaba rifando, quién más podría estar imputado en aquella trama con una lista de sospechosos cuyo principal delito era no callarse y traficar con risa tonta. La magia del número es que se consigue el mismo pero sin la lampara oscilante, ni el asfixiante cigarrillo, ni la pistola haciéndote caricias en la sien. Pero aún así la delincuencia juvenil es dura de roer y también me tuvieron que implicar a mi. Yo soy el alumno comodín, ese al que se le pregunta "Verdad que sí, Carmen, ¿verdad que usted sabe muy bien qué se está rifando y en qué cantidad? Sí, usted sabe de qué hablo, así que dígaselo a sus compañeros.", con la miranda perdida en La Meca. "No, no se nada de ese contrabando, no conozco a ninguno de los aquí presentes y exijo el abogado más caro de todo Manhattan". Pero como ninguna de esas cosas es cierta o posible, el alumno (en este caso alumna) comodín, ha de responder "Sí, sí, claro Alfredo. A ver chicos, que nos callemos o nos caen reflexiones escritas".

El espíritu del periodismo.
En la trama Paloma que se estaba tratando el horno ya no aceptaba bollos ni aunque los hubiera preparado mister Ferran Adriá. Para tanto era que Alfredo me dijo algo así como: "Y escriba todo esto en su blog, ese en el que habla de tantas cosas, escriba que sus compañeros son unos mongoles y que no hacen caso". Mi pregunta de "¿con tacos y todo?" sobraba, pero yo lo decía con el espíritu del periodista ese que va por la calle con gabardina y un sombrero con un papel que pone "Press". Yo me medio comprometí a hacer saber al mundo que en mi clase somos unos zascandiles de mucho cuidado que ríete tu de Zipi y Zape, que una paloma nos roba el sueño y nos hace poner cara de "he visto un billete de 500, y además era de color morado", y que la mayoría de nosotros tiene como amigo en el Tuenti a Austrolapitecus Converse Atapuerca.


Además lo he dicho sin tacos, así que espero que Alfredo esté feliz. Bueno, pues ahora que ya sabéis que es lo que pasa en las clases de Gimnasia mientras intentamos callarnos para empezar con las acrobacias, si os parece bien, voy a salir a enfrentarme a la lluvia para comprar una hucha donde empezar a ahorrar para el abogado ese de Manhattan. Yo que vosotros me leería esto aprisilla porque si hay algún desagrado hacia el post por parte de Alfredo o mis compañeros, esto se disolverá en el universo como el azúcar en el café. Y sobre todo, paz y amor. By Carmen:D.

viernes, 18 de enero de 2013

Happening in the rain.

Hola queridos/as lectores/as!!! Este es uno de esos días en los que entre el último de los tres signos de exclamación y la primera mayúscula hay una agobiante pausa cargada de pensamientos en blanco. ¿Qué escribir? ¿De qué hablaros? No lo sé, ya que, como de costumbre, a la primera mayúscula le siguen una serie de palabras que no tienen ningún fin en común, excepto observarse a sí mismas y ver como van llenando el espacio en blanco sin decir nada. Esa es mi parte favorita de escribir: las palabras multiplicándose como bacterias (qué símil tan horroroso, adiós al dramatismo).
Escribir....por si ha alguno os importa, os diré que ya han arrancado de cuajo dos carteles de Cartapacio. Viva el desmembramiento del papel. Y hablando de papel (de nuevo por si a alguno/a le interesa), el día después de que yo pasara por las clases del instituto promocionando mi campaña al Consejo Escolar quejándome del mal estado de los baños, el día después, muy eficientemente, aparecieron unos gigantescos rollos de papel en cada baño. Milagro. El maná siguió cayendo hasta que esta semana aparecieron unos papeles en cada baño, sin firma aparente, diciendo que habían confiado en nosotros (alumnado) pero se ve que algunos aún no habían evolucionado y habían hecho un buen y contundente pop-art con el papel. Creo que todos nos imaginamos las bolas mojadas de papel colgando del techo y saliendo por las ventanas. Bueno, después de un intento pirómano de quemar el instituto, sino de asfixiarnos (lo cual me fastidia porque en mi último relato quemo el instituto, pero para que sea original solo se me tiene que haber ocurrido a mi quemar el instituto) ya no me sorprende.

¿ Veis como las palabras a bulto llenan bastante? Es lo que debéis hacer cuando en  un examen de Biología no sepáis describir algo. Sabiendo lo mismo (osea, nada) puedes ventilarte el corazón y sus pringosos anexos en dos líneas u ocho. ¿Os habéis dado cuenta de que todo el mundo parece enfadado?  Bueno, no, no es enfadado, es...es molestado (porque molestar, enfadar y cabrear no es lo mismo, creerme). Hoy llueve, ahora llueve, estos días ha estado lloviendo, nublado. Eso nos ha crispado los nervios. A todos. Aunque solo sea en nuestro subconsciente. Nadie escapa de la lluvia, es más poderosa que nosotros. La gente va deprisa por la calle, miran antes si llueve, abren sus paraguas con angustia porque le rocen esas gotas mortales, marchan (eso es deporte olímpico, no os riáis) por debajo de los alféizares de las casas, como si estuvieran en una película de espías, y cuando llega el semáforo echan una carrerilla, pero da igual porque al llegar al siguiente alféizar les cae encima los goterones de los canalones (pareado:).

Creo que no es el primer post ni el último donde me recreo sobre el tema de la lluvia, pero es verdaderamente interesante. Hoy he procurado que el malestar lluvioso generalizado no me rozase y he salido a la calle como si fuera cualquier otro día. Mis zapatillas han quedado caladas, pero los segundos calados ya no duelen tanto como los primeros. A mi mochila se le ha roto la cremallera y he vuelto a casa con ella abierta completamente, llevándola entre los brazos como si fuera la bolsa de plástico con la compra que temes que se le rompan las asas por todo el peso que lleva. He sido inmensamente feliz viendo como las gotitas se comían el libro de Mates y el de Tecnología. Ah, y también he tenido que llevar el paraguas plegable en la boca, porque solo tenía dos brazos y era para la mochila (el mango de metal estaba frío). Ahora miro el cielo encapotado por la ventana pasivamente, observando a las gotitas de agua que hacen esquí en el cristal. Las tareas llaman a la puerta de mi habitación, pero si hace falta levantaré barricadas para concentrarme en esto. A mi la lluvia  me descarga el estrés y me recuerda a Asturias.
En Asturias siempre esperamos la lluvia. 
 Mantengo que para ser la persona más feliz del mundo solo tienes que esperar un buen día de lluvia y salir a la calle: ver como toda tu ropa, el móvil  si acaso el dinero, la mochila y todas tus posesiones se mojan y estropean; abrir la boca y sacar la lengua sonriendo, extender los brazos al más puro estilo "soy el rey del mundo" y dar vueltas sobre ti mismo/a muy rápido, a ser posible riéndote. Es el máximo grado de expresión de la filosofía hippy: las posesiones materiales no importan, solo el equilibrio espiritual (ooooooommmmmm). Un happening en toda regla y sin LSD, ¿qué más queréis?

Es lo que tiene la vida, yo os iba a contar otras cosas pero ahora ya no creo que importen. No, realmente no importan. No se vosotros, pero yo voy a pasarme la tarde haciendo happenings bajo la lluvia (sin LSD) y levantando barricadas contra el libro de Mates, que ahora viene a vengarse por haberle dejado empaparse, y la Tabla de los Elementos Químicos me está rogando que le deje entrar. Si me descuido se alían todos y acabo estudiando, lo más seguro.
By Carmen:D

domingo, 13 de enero de 2013

Cartapacio. Ya puedes temblar, mundo.

Queridos/as lectores/as: está nevando! (Hola, por cierto). Es que aún no me lo creo, hoy me levanté y estaba nevando. Luego salí corriendo a la terraza a poner la cabeza debajo de la nieve y ha reírme como si estuviera en el Parvulario, porque desde que iba yo a 1º hace que no nevaba. Y 1º ya está muy, pero que muy lejos. Vamos, que yo contenta de la vida con la nieve. Ojalá que dure hasta mañana.
Logo de Cartapacio garabateado por servidora.
Voy a pasar del rollo de "perdón, perdón, siento no haber escrito antes", porque ya os dije que tardaría en escribir y porque tengo cosas más interesantes que contaros. Este es el primer post de las novedades novedosas del 2013, así que atentos.

En el IPI (Instituto Padre Isla, o directamente el Pisla) se ha creado un divino de la muerte maravilloso Club de Escritura. De nombre Cartapacio. ¿Sabéis qué es un cartapacio? Pues es lo que usaba el majo de Cervantes para guardar las servilletas de los mesones donde iba escribiendo el Quijote. Vamos, un archivador de cuando se usaba pluma y espada a la vez. Ya había un Club de Lectura, mixto (profesores, alumnos, padres), pero este además es "Por y para alumn@s". La dinámica consiste en reunirse una tarde al mes para leer cada uno el relato de la temática que se haya acordado escribir anteriormente (no se obliga a nadie a leerlo en voz alta). Después, entre todos lo comentamos y decimos lo que nos gusta, lo que no...Fácil, no?

Ahora que ya os puede haber picado la curiosidad, os digo que de los tres aficionados que llevan el proyecto, yo soy una de ellos (y es uno de los proyectos más interesantes en que he estado, a la par que el blog). Dato para los librófilos, otro de los socios fundadores es Carlos, del archiconocido blog Libros en mi memoria. El colaborador que queda para completar la plantilla es Ángel, su hermano. Creo que en el instituto, por unas razones o por otras, se nos conoce a todos. Ante todo tengo que decir que sin la ayuda de estos genios me habría quedado con un nuevo proyecto fracasado entre las manos.

Cartel para la primera reunión.

Vayamos con los motivos. El año pasado, el Dep.(artamento) de Ed.(ucación) Física hizo una actividad para el programa "En tiempo de Recreo" que se basaba en que los alumnos/as plasmásemos nuestros joviales pensamientos respecto a la media hora de libertad condicional en un papel para que se leyeran. Me parece que solo escribimos cinco, pero yo quedé muy contenta con mi relato (lo tenéis en la sección correspondiente, se llama "Vuelo matinal"). Este año el profesor de Gimnasia (lo siento, pero así es más rápido y todos sabemos a qué me refiero) quería hacer lo mismo y algo más, algo como que también nos reuniésemos y comentáramos nuestros relatos sobre el recreo. Nos lo comentó y el resto fue cruzarse por los pasillos y el patio y planearlo todo, hablar con el Director (tan majo como siempre), Maite (asesora perfecta para cualquier idea) y debatir muchos aspectos. Creo que llevamos con esto en la cabeza desde mediados de noviembre, pero los primeros carteles salieron la última semana de diciembre.

Una vez que os habéis enterado de qué va, solo me queda una cosa por deciros: si sois de Padre Isla y os gusta escribir, ya estáis viniendo a la primera reunión. Este proyecto nos viene genial a los que nos gusta escribir, sería una pena desaprovecharlo. Os dejo el último cartel con la información. Pronto la reseña de "Los Miserables" y más asuntos. By Carmen:D
Posdata: para algún imbécil como yo, una página es un folio solo por una cara.
Posdata2: faltaría más, para cualquier duda, preguntadnos.

Viernes 25. 17:00h. Biblioteca del Pisla. 
Un relato sobre tí mismo de no más de una página.
Atrévete y verás.

jueves, 6 de diciembre de 2012

eOne.

Hola queridos/as lectores/as!!! ¿Qué tal todo?  Yo bien, otra vez lo exámenes nos axfisian a todos, así que se me hace difícil escribir.  Bueno, pero aquí estamos ahora y eso es lo que importa. Lo que hoy os voy a contar es algo muy, pero que muy flipante. ¿Conocéis a Jimi? Solo lo he mencionado una vez, en un relato de cuando empezamos 3º. Bueno, pues llevamos unas cuantos meses de clases de Dibujo con Jimi. Y creo que todos hemos llegado a la conclusión de que Jimi es irremplazable. Y os lo voy a demostrar.
El otro día, el viernes, cuando ya teníamos el proyector preparado para dar la clase de puntillismo, resultó que íbamos a hecar el regalo para el hijo pequeño de Jimi, Noé. El regalo consistía en toda una obra de arte: mientras una canción sonaba, Jimi iba dibujando en nuestra (ojo, la nuestra, no la de otra clase) pizarra con tizas. Cada nota es un golpe de la tiza. El dibujo es la evolución de su hijo en su año de vida. Empieza poniendo "Happy one year", cosa hábil, porque one también contiene "noé". Luego dibuja un sol, y a partir de ahí saca todo un paisaje natural. El árbol que dibuja simbolíza a su hijo, y todo lo que va sucediendo (la lluvia, los truenos, la hierba, las montañas) son las cosas que le van pasando. Os cuento esto para que sepáis un poco de qué va y porque el sol del principio no se ve. Os dejo el vídeo, que lo van a colgar en la página de instituto, donde véis nuestra clase (repito: de todo nuestro instituto, es nuestra clase), aunque solo séan los dos encerados. También os dejo unas fotos de otro trabajo de los alumnos/as de Jimi, el Me Gusta. Para saber un poco más de qué va, aquí.

Bueno, solo era eso. Que pena, que gran pena que se vaya....pero Jimi, que sepas que eres el mejor profesor. A ver si me da tiempo de escribir algo más en este festivo....ah, bueno, claro, feliz día de la constitución y todo eso...By Carmen:D.



viernes, 30 de noviembre de 2012

Vini, vidi y no vincí.

Hola queridos/as lectores/as!!! Todo, todo sienta bien, pero más la escandalosa proximidad de las vacaciones y, consecutivamente, de las fiestas navideñas, excusa para el desmadre económico que este año se va a quedar sin desmadrar con las dichosas pagas extras de navidad...por lo menos en mi casa. Ahora que pensaba esperar el fin del mundo comiendo polvorones y diciendo Pamplona a todo el mundo. Antes de que se me olvide, como respuesta a una discusión entre el instituto y casa, declaro oficialmente que no sé si esto es más el novamás que Tuenti, pero al fin y al cabo es lo único que tengo, así que al que le pique que se rasque y a mi que me dejen en paz con el "¿Por qué no te haces Tuenti?"
Que manía tengo de poner preliminares a todo...En fin, que el miércoles 20 de noviembre del 2012, después de ser acosado por mi durante los 6 intercambios de clase que tiene un día, el director se dignó a colgar los resultados de las elecciones en el corcho de anuncios. Conste que mareé a todo bicho viviente para que colgaran esos papelajos siempre autoritarios de una maldita vez, pero hay que decir que actuaron con bastante rapidez (un día). Es más, cuando yo fui a votar me dijeron que ya tenían los resultados y no me lo iban a decir. Así, restregándolo bien por la cara.
No sé yo si el director fue el único que se sintió acosado por mi presencia, porque mis compañeros de instituto llevan aguantando mi omnipresente apellido cuando salen y entran del instituto, en los pasillos, en el suelo del patio, las mesas, el encerado del gimnasio (sí, convencí a Alfredo para que me dejara poner mi "Vota Reivelo", gracias Alfredo, el siguiente paso de cordialidad será que me apruebes), los baños, las mesas, los pasillos....en fin, que el Espíritu Santo ya tiene compañía.
Esta curradísima campaña electoral desembocó en un montón de masa célica (de celo, no de encéfalo), gomas elásticas para enrollar carteles...alguno aún lo tengo en mi cajón del pupitre, junto con los folios que puse en las ventanas, que tuvieron el detalle de arrancar y destrozar mis compañeros de clase delante de mis santas narices. Aquello me dolío mucho. Les guardo un poco(mucho) de rencor..:$

Vamos, que estuve arañando votos hasta el último momento, porque también me presenté en las jornadas de votación de por la tarde, para el Bachillerato Nocturo y FP. Como los pobres no tenían ni idea de de qué iba la película, cuando me veían apostada en la puerta de las sala de votaciones (a ver, no tenemos ninguna Sala de Votaciones, es la sala dónde hacemos todas las cosas importantes y ponemos un proyector para ver pelis en francés, no os creáis que tenemos hasta una sala para contemplar eclipses solares completos.) me preguntaban que a quién tenían que votar y yo les respondía, obviamente, a mi favor. Me tachaban en la lista delante mio.

Y aún así, fue poco. Sí, sí, sí, cómo lo oís. Esta vez no me he equivocado con la fecha del Día de los Inocentes. Si solo podían entrar dos candidatos, yo me quedé a las puertas del paraíso, pese a estar ya casi emparentada con el Espíritu Santo. Salieron los dos que se habían presentado de Bachillerato. ¿Qué cómo reaccioné? Bueno, me compré 10 ositos de gominola en el quiosco de la salida del instituto, así que creo que es bastante celebración. 184 personas depositaron su confianza en mi (incluida yo, pero yo no cuento, que ya me conozco) a las cuales les estoy muy agradecida, de verdad. Ha habido gente que me ha visto, por lo pasillos o si hemos coincidido y me han dicho "Yo te voté". No creo que ahora le digan a Rajoy "Yo te voté" (normal, es una vergüenza  o no, nunca votamos a el candidato cuyo nombre está en la papeleta, si no al que creemos ver. Osea, que no se a quién votamos, y eso que yo no puedo votar). A todos esos gracias, por que son la mar de majos/as. Aunque también os digo que los de el estilo contrario ("jajaja, no has ganado") tampoco han faltado a su cita. Para ver la hoja con los resultados de las votaciones, pinchad aquí.

Una cosa os digo: de lo que me autocondecoro con todo el morro del mundo y más es que he dado más vidilla a estas elecciones escolares de la que Jefatura había dado en su vida.
Aún hay un poco de polémica de cómo quedan las cosas, pero esa parte ya no nos interesa ni a mi ni a vosotros, verdad? Por lo cual dejo aquí la crónica de espectador y autor de unas elecciones muy al estilo de las que hacíamos en Utopíalandia...a la altura de las de USA (cómo no, si soy la coetánea gallega de Obama, no nos olvidemos)
By Carmen:D.

sábado, 17 de noviembre de 2012

Los extraños seres que habitan los insitutos.

Hola queridos/as lectores/as!!! No hay nada mejor que unos cuantos actos de salvajismo estudiantil para  reafirmar la teoría de que el hombre desciende del mico (pobre, pero pobre mono). Motivada por ello, me decido hoy a enfrentar las verdades y mentiras más inverosímiles que reposan sobre la actual generación moradora de los institutos (se entiende que públicos, supongo que en un privado será diferente, pero yo de privados no quiero saber nada de nada).
Como, sencillamente, me voy a dedicar a soltar sin tapujos todos los trapos sucios con los que carga mi clase, ejemplo como cualquier otro, para proteger las identidades mi integridad física y psicológica, todo personaje que aparezca  estará numerado como A,B,C....siendo este método usado para otros casos similares. Cualquier parecido con profesor/alumno que les podáis encontrar a la gente de la que os hablará es falso, y negaré ante notario haberme referido alguna vez a ellos, jurando sobre una novela de Mark Twain, ok?

Solo quiero decir una cosa más. Nosotros sí mordemos.

Vale. Una vez establecidos todos los postulados, empezaré a disparar. ¿Vosotros tenéis una ínfima idea de lo que son 30 personas (29 alumnos/as + un/a  profe) durante seis horas? ¿Cuántos metros cuadrados puede tener el aula 209? Da igual, es claustrofóbico de todas maneras. En mi fila somos 7. Al pobre A le toca estar pegado a la puerta casi. Los demás estamos todos encasillados, con un espacio para la silla de 50 centímetros entre mesa y mesa. Cada vez que alguien intenta salir de clase, tengo que encogerme en mi asiento para dejarme pasar porque no hay ninguna otra salida. Para el que no tenga su hábitat en el instituto, que sepa que hablar de clases, filas y pupitres para nosotros es como hablar del bar de la esquina, el trabajo y el súper. Cuando hay que hacer exámenes hay que subir a cinco personas a la tarima porque no hay manera humana de que quepamos sin un campo de visión perfecto para copiar. B, que se sienta atrás del todo, tiene, literalmente la silla encajada entre el armario de metal y la ventana que no se abre. Parece que está allí, al fondo, enterrado en vida, sepultado en un ataúd invisible, pero qué más dá que se vea o no si, de todas formas no se puede mover.

Eso en cuanto a la distribución física. Vayamos con la moral. En realidad ahí no hay distribución moral porque no llega ni para una persona. Cuando se hizo la reunión de padres y madres con la tutora C, a principio de curso, aparte de hablar de la maravillosa y codiciada excursión a Francia, C tuvo el detalle de decir que, probable y confidencialmente, eramos la mejor clase del curso. De nosotros se esperaban medias altas, comportamientos de jóvenes juiciosos y rendimientos de dedicados alumnos. Ja! Me río en su cara (con respeto). Espera, espera a que pasen unas cuantas semanas...Y pasaron, vaya si pasaron. Lo que al principio los profes acusaron a una prolongación psicológica del verano en los adolescentes se convirtió en un síndrome de cachondeo general, pasotismo absoluto, suspensos suspendidos, infracción del límite de decibélios impuesto por la OMS en clase, tortura al material escolar y mala leche de los compañeros/as para los compañeros/as. Felices tiempos aquellos en los que C nos propuso sacar ya no las mejores notas del curso, si no del instituto. *Suspiro*

Pero el peor plato del banquete está siendo sin duda para los ya bastante vapuleados profesores/as. D opta por contar con cronómetros los minutos que tardamos en callarnos, el resultado multiplicarlo por el número de personas en clase y dividirlo entre nuestra edad. En un mes deberemos traer el resultado final en copias (a saber: 10min por 30 personas= 300:14 años=21 copias).
E, más acostumbrada a dar clases a alumnos de Bachillerato se asombra de que nuestras redacciones comiencen con un jovial "Erase una vez, los duendes verdes del Gran Bosque....". Esto, unido a un absentismo por parte de los deberes, que extrañamente desparecen siempre, hace las delicias de los gritos de una soprano, acompañado por el rechinar melancólico de una puerta que no para de ser abierta y cerrada con portazos.
F, que lleva con nosotros desde que el mundo es mundo, prefiere callarse paulatinamente, señalando cualquier lugar perdido de Asia mientras nos damos cuenta de que le estamos minando la moral, pero seguimos a lo nuestro. Se nota mucho cansancio mental en esos ojos, creerme.
Portada de "Los Profes", de Pica & Erroc. Cómic que recomiendo.
G, con fama de ser la más severa de las profesoras (y profesores, si me apuráis un poco), últimamente esta sufriendo contundentes revueltas en su mandato matemático, solucionadas con parches de copias, pero que pronto reventarán. Sobre todo porque, aunque se lo manden, nadie sabe cuales son las identidades notables y su desarrollo. Os diré que solo hubo 6 aprobados en el último examen, y estoy empezando a notar síntomas de agilidad manual para falsificar firmas paternas en mis compañeros.

A H le hicimos en la última clase el Día Paella. Consiste en que cada fila es un ingrediente de la paella (arroz, almejas...) y todas juntas son la paella. Uno de nosotros decía: "Langostinos" y esa fila se ponía en pie. E íbamos levantándonos todos, hasta llegar a la paella. Parecía un número de cabaret. H se quedó más bizco de lo que ya es. Supongo que su cabeza le dio para entender que aquello no tenía nada que ver con los estados de agregación. Me parece que ahora se plantea coger la baja por depresión.

C, en sus clases, además de la de tutoría, tenía, sin duda alguna, la politesse más apolitessada que se haya visto fuera de Francia. Siempre sentada como si llevara un corsé diminuto  con el espacio sobrante para colocar la cartera en la silla. Quién te ha visto y quién te ve. Ahora está tirada, derrumbada, con una mano sujetándose la cabeza y entrecerrando un ojo, de manera que la cara le queda bastante distorsionada, y ya no hay espacio en la silla que no llene su desesperación académica.

I nos chilla y se niega a tocar partituras con nosotros en clase, J nos acusa de tener "complejo de jóvenes alborotadores", mientras nos señala con esa vara estrecha, cargada de complejos de anti-disturbios.
 K nos pone "parejas virtuales" en los exámenes. Así, si uno copia, le baja dos puntos a su pareja virtual. Estas parejas no se conocen, pero suelen ser tu antónimo, la persona con la que no te llevas. El kit de la cuestión es que cuando tu pareja se entere vaya a arreglar las cuentas contigo. Dicen que las chicas suelen desarrollar mucha mala leche en esos momentos, así que, por favor, ya estáis avisados, no copies, que el cabreo a mi se me desarrolla más rápido de lo normal.

A mi el que más miedo me da es L. Mientras en clase se pasa absolutamente de todo, móvil en ristre, y yo hago cómo que no me entero de que me están colgando papelitos que ponen "Soy tonta" en la chaqueta, mientras todo ha perdido ya el norte, L se calla, muerde el labio inferior, entrecierra los ojos con cara de mirar a su presa y asiente para sí mismo, cómo diciendo: "Qué bien estarían todos asados con patatas, en una comida benéfica para el próximo día del docente, no?". Y a mi, mientras un escalofrío me recorre la espalda, a pesar por el radiador, solo me da por pensar "Aquí se está fraguando el futuro gaseamiento de mis compañeros de fatigas. Descansen en paz mis compañeros de fatigas".
Por ello, cuando el otro día L nos pasó una lista para que fuéramos firmando uno a uno, no pude reprimir un "No!! No lo firméis! Se han puesto de acuerdo! Es nuestra sentencia de muerte, nos trocearán y nos freirán como carne a la parrilla y luego dirán que nos hemos suicidado porque la sociedad nos odia!"

Y llega el momento magnánimo de preguntarse: "¿Quién es el culpable de todo esto?". ¿Será Rajoy? ¿O tal vez la crisis? ¿Quizás los pérfidos e inocentes profesores? ¿ Mi generación de simios?....
Pues no. Álgebra, yo te declaro culpable de todos los males del mundo, incluido tu mismo.
By Carmen:D

sábado, 10 de noviembre de 2012

El apellido se me ha quedado corto.

Hola queridos/as lectores/as!!! Y pensar que solo era hace dos o tres posts que presentaba mi candidatura oficialmente y ahora ya estoy en el vértice de pasar a la historia por record guiness de ridículos en un solo día....Ay, que vida esta:P.
Si sois padre isleños, sabréis de lo que os hablo. El viernes, exactamente a las dos menos diez, cuando acabé de explicar a mi Comité de Elecciones sus tareas específicas  diez chavales/as (tentados por perderse una hora de clase, no por otra cosa, que milagros hoy en día...) salimos a los pasillos para difundir la primera campaña electoral de instituto. No veáis lo cucos que me quedaron los carteles. Y decían en la portada: vota Reivelo!!! Toda una declaración de intenciones.

A mi me tocaba ir a 4º. Había dos personas para cada curso. 26 clases en total. A 5 papeletas por clase. A saber, 25-20 por curso. Más ocho carteles, uno por cada clase de 1º y 2º de Bachillerato. 30 minutos. Entrar, se puede, venimos a traer unos papeles sobre las candidaturas al Consejo Escolar, como hay pocas repartidlos entre todos, eh? Bueno, nosotros ya nos vamos. Eso era en un principio, porque en algunas clases nos pidieron que desarrollásemos la parte de "candidatura consejo escolar" y nosotros nos quedamos como en "Desarrolla la función del tejido epitelial glandular y sus diferentes subtejidos" del examen de Biología. La verdad es que me quedó una actuación bastante magistral, digna de pelis americanas, pero cuando salía de la clase en cuestión tenía que reposar con los mofletes (me sobran mofletes, ok? complejo de hamster...) apoyados en las frías baldosas de la pared y airearme un poco de los nervios que pasaba. Pero convencía a un buen porcentaje de alumnos/as de que me votaran (en realidad, no tengo ni idea de cuanto).

Estaba orgullosa del reparto. Solo nos faltó una clase, por negligencia mia. Pensé que la puerta estaba cerrada (osea, que estaban en cualquier otra clase) y en realidad estaban allí. Fallos del oficio. Todo era medianamente happy. La gente había dicho que me votarían. Total, que llegué a clase. Otro tipo de percances me distrajeron durante lo que quedaba de clase. Consulté con mi Comité. Todos los papeles habían llegado bien. La bocina estalló en su repulsivo sonido, laureado tan solo a las 2:30. Salimos. Jamás debí hacerlo.

¡Vota Reivelo! Eso fue lo primero que oí. Y luego oí que me buscaban cómo quien busca a un fugado para poder colgarlo de una vez. Las partículas de la teoría cinética cumplían su función, procurando excesivo movimiento a todo bicho viviente. Excepto a mi. En ese momento me dí entera cuenta del velo sagrado que había profanado, de la fina pero mortal línea que había cruzado imprudentemente. Aquello me marcaría de por vida, fijo. ¿Cómo había podido perturbar el aburrimiento de una clase de viernes a última para entrar, con mi subjetivo altruismo por bandera, y empezar a hablar a callejeros adolescentes de lo asquerosos que estaban nuestros baños, de derechos y deberes, realidades y elecciones, con la voz encendida, con el grito en el alma, empujándolos a todos a que vieran el mundo y lo cambiarán? ¿Cómo podía haberme equivocado en la fecha del día de Los Inocentes?

Acto seguido, el miedo y una necesidad fisiológica de cambiarme de apellido se apoderó de mi. Al primero que me preguntó si yo era Reivelo le dije que no, que en realidad era Simpson, de pura cepa española. No se qué fue peor. Luego vino el "¿pero en serio que tu has escrito esto?". Para el mal informado o fuera del gremio, las posibilidades de que un adolescente medio escriba ese mini-miting se cotizan a -50$ en Wall Street. Lo leían en alto, poniendo voz de Mary con su blanco corderito que a todas partes la seguía. Algunos se erigieron como mis gloriosos Directores de Publicidad y Marketing, recomendándome arduamente la producción en masa de pins "Vota Reivelo". Por el contrario, los pins de propaganda electoral se cotizan bastantes altos en los quioscos del barrio. Los hubo también que se negaron a votarme, con mi panfleto en la mano como testigo. La salida del instituto fue entre "Carmen, te vamos a votar!!" y "Carmen, ¿cómo has podido meter a Mafalda aquí?". Para gustos los colores.
Hasta casa, me entretuve persiguiendo, abordando y hablando con padre isleños/as que no tenían mis folletos. Había hecho una apuesta con una compañera a que no era capaz de hacerlo, asaltar a la gente en medio de sus cotilleos para promocionarme. Fijate que buena soy, que esperé a que se fuera para ir y que no perdiera 5€. Y lo hice justo cuando pasaba el trasto ese limpiando la calle con un ruido de mil demonios. Nadie es perfecto.

Eso fue solo el principio. Os queda una semana de sentaros en Música/Tecnología/Dibujo/Gimnasia y ver en vuestras mesas/encerado: "Vota Reivelo!" Lo veréis en las paredes, en los baños, en las ventanas y en el suelo. Acabaréis soñando con Vota Reivelo.
¿Queréis saber cómo me llaman ahora? Reibama.
By Carmen:D

sábado, 27 de octubre de 2012

Vota By Carmen:D.

Hola queridos/as lectores/as!!! Jo, son ya las ocho de la tarde. Estoy sustancialmente agotada. Es que vosotros no sabéis bien (o sí ) lo que estar dos horas (no es exageración) recortando tipografías del tipo de "Los Barriguitas", "Barbie", "Pinypon", "El Bebé Mimitos". Es un poco demoledor para el ánimo, pero no hay otros ejemplos mejores para el trabajo de tipografías de Dibujo. Si os fijáis bien, la mejor forma de llenar 5 folios con 100 tipografías distintas es cogiéndose el folleto de Juguettos que te dejan siempre desperdigado en el portal. Es lo que hice yo^^.

A lo que voy. Como no sabéis, por estas calendas de nuestro calendario, en todos los centros educativos de nuestro educativo país, se hacen elecciones al Consejo Escolar de cada educativo centro. El Consejo este está formado por tres profes, tres padres/madres, y tres alumnos/as. Su función es proponer cosas de mejores, debatir temas y sacar conclusiones. Mejorar la vidilla del centro (educativo), vamos. Aún tengo el recuerdo encandilado de mis primeras votaciones. Yo era una alegre colegiala que acababa de llegar al instituto hace dos años y no sabía ni donde estaban los baños (os parecerá de risa, pero bien mal que lo pasé). Así que no sabiendo donde están los baños menos sabía de la gente. Total, que llegué allí y alguien me dijo: vota a este que es el hermano mayor de uno de nuestra clase. Como si me dices que es el amigo del cuñado de la peluquera de tu hermana. Pues vale. Y así fue como yo contribuí a que ese chaval ganara su puesto actual. ¿A que parece fácil?

Este año estaba yo efectuando operaciones de alto riesgo en Jefatura, que tenían que ver con un curso de mediadores (al que finalmente estoy apuntada), cuando llego el Director, pongamos, para abreviar, el Dire. El Dire (nuestro Dire) es tipo muy majo, la verdad. Cada vez que me acuerdo del anterior....En fin. Vamos, que me dijo: "Bueno, a Carmen también le daremos una inscripción  no? Con lo que le gusta a ella esto...Además todos tenemos que tirar del centro (educativo), no?" En plan "por el poder que me ha sido concedido, yo, Dire del mejor instituto de todo León, te hago caballero de la Tabla Triangular."
En ese momento los engranajes de mi cabeza empezaron a girar a muchas revoluciones por minuto, y las susodichas elecciones aparecieron en el limbo de mis pensamientos mientras se me ponía esa sonrisa de psicópata. Eso quiere decir que se me ha ocurrido algo. Decidido, yo me presento.
Y es que, unas de las otras cosas que me apasionan y considero que se me dá mediana y humildemente bien, es todo ese complicado mecanismo de las leyes, política, etc. Concepto abstracto, pero dejémoslo en que me pirra defender causas perdidas (con vistas a estudiar Derecho). Y de momento, tengo que quejarme por el asqueroso estado que empiezan a tomar, un año más, los baños. Me da igual que los poemas de amor desgarradores formen parte de nuestro patrimonio cultural juvenil.

Viendo estas circunstancias, ya me informaré de si aquí también se hace campaña (supongo, digo yo) y entonces podréis ver el instituto con carteles del tipo de "Vota a Carmen y no tendrás que venir a clase". Y puede que gente y profesores con los que habléis estén especialmente contratados y pagados para promocionarme. Si tengo que poner algo más (info, datos sobre qué pienso hacer, blablabla), ya pondré otra entrada.
Era para anunciar oficial y formalmente mi candidatura (dicho así, parece que me estoy haciendo vieja). By Carmen:D.
Posdata: acepto aportaciones en ideas, logos para la campaña, diseño de carteles, y plantilla para un grupo de colgadores de carteles....Todos tenemos que tirar del centro,no?